...en Vigo
El banco de pruebas en la Liga de José Mourinho va dando sus
frutos. Sin opciones de revalidar el título está concediendo
oportunidades a los hombres de banquillo. El último ejemplo lo tenemos en
Marcelo. El brasileño firmó ante el Celta de Vigo su mejor partido con el Real
Madrid desde la rotura en el quinto metatarsiano del pie derecho.
En Balaídos se vio algo del Marcelo de la temporada pasada.
Y es que sus grandes actuaciones le condujeron hasta el once ideal de la FIFA
junto a otros madridistas como Iker Casillas, Ronaldo o Xabi Alonso. Todo ello
coincidía con nuevas convocatorias para la selección brasileña de cara a apuestas por partidos internacionales
y el reconocimiento de la prensa de todo el mundo.
Sin embargo, la lesión afectó a su estado de forma. Un
Marcelo entrado en kilos reaparecía el pasado dos de febrero en Los Cármenes.
Su baja forma le valió una reprimenda pública por parte de Mourinho y un
castigo temporal.
Mourinho le obligó a entrenarse en sesiones dobles junto a
Higuaín y parece que ha escarmentado. Frente al Celta el brasileño lució una
figura más atlética, subiendo constantemente su banda. Marcelo dio salida al
equipo por la izquierda con sus llegadas en segunda línea y sus asociaciones
con Ronaldo. Una conexión que se echaba en falta esta campaña.
Marcelo da señales de vida en el momento más crucial. Por
delante el Madrid tiene varias eliminatorias de la Champions en el sueño de
conquistar la Décima y un derbi pendiente contra el Atlético con la final de las
apuestas en Copa del Rey como
telón de fondo. Eso sí, antes debe
desbancar a Coentrao. Durante el lapsus de ausencia de Marcelo se ha ganado la
confianza del técnico, disputando partidos clave como el duelo de Copa ante el
Barcelona y el del Manchester en la Liga de Campeones. Además, ha rendido a
todos ellos a gran nivel sin prodigarse tanto en ataque, pero dando equilibro
defensivo al equipo.
El lateral deberá exprimirse ahora al máximo. Desde la
marcha de Heinze al Marsella no tenía tanta competencia en su puesto. Durante
la etapa de Pellegrini tuvo en Arbeloa a su recambio natural, mientras que con
Mourinho siempre había estado por delante de Coentrao.
Carlos Cruz
No hay comentarios:
Publicar un comentario